Según señala el informe, el total de defunciones producidas en España durante ese año ha sido de 390.419, esto es, 12.531 menos que en el año anterior (–3,1% en términos relativos), un descenso que, en opinión del INE, se ha visto afectado, en parte, por “el importante incremento de la mortalidad por enfermedades respiratorias que se registró en 2012”.
Los nuevos datos sitúan al grupo de las enfermedades del sistema circulatorio como la primera causa de muerte (252,1 fallecidos por cada 100.000 habitantes), seguida de los tumores (238,3) y de las enfermedades del sistema respiratorio (91,4). Las enfermedades del sistema nervioso, que incluyen al Alzheimer, fueron la cuarta causa de defunción (46,1).
Al igual que el año anterior, los trastornos mentales constituyen un 4,3% del total de fallecimientos, situándose una vez más, en sexto lugar, con una distribución por sexos en una proporción de 2 a 1 (47,4 mujeres frente a 25,2 hombres).
En el desglose de los datos por género, los tumores se erigen como la primera causa de muerte en los hombres (con una tasa de 295,2 fallecidos por cada 100.000, principalmente debido a cáncer de bronquios y pulmón y cáncer de colon) y la segunda en mujeres (con 183,1, en su mayoría por cáncer de mama).
De acuerdo con el análisis de las cifras en función de la edad, el principal motivo de mortalidad para los grupos de uno a cuatro años y de 10 a 39 años, fueron las causas externas (accidentes, homicidios, suicidios,…), con unas tasas de 3,4 y 13,0 fallecidos por cada 100.000 personas respectivamente en cada grupo de edad. Por otro lado, para las personas de cinco a nueve años y de 40 a 79 años la primera causa fueron los tumores.
Centrándonos en los fallecimientos por causas externas, el informe recoge que, en 2013, se produjeron 14.678. En este punto, el INE considera necesario resaltar que, “debido a la disponibilidad de una nueva fuente de información judicial, se ha introducido este año una mejora metodológica en el proceso de esta estadística, que ha permitido asignar de forma más precisa la causa de defunción en las muertes con intervención judicial”. Como consecuencia, defunciones que estaban asignadas a causas “mal definidas” han sido reasignadas, a partir de 2013, a causas externas específicas, al recuperarse información sobre causas externas en la Comunidad de Madrid gracias a los datos del Instituto Anatómico Forense. A este respecto, puntualiza: “la mejora incorporada tiene el efecto de que la serie no sea estrictamente comparable con la de años anteriores”.
No obstante, si bien los datos no serían comparables con los de otros informes previos debido a la mencionada mejora metodológica, las cifras obtenidas apuntan que el suicidio constituye, de nuevo, la principal causa externa de muerte en España, con un total de 3.870 personas fallecidas (2.911 hombres y 959 mujeres), y una tasa de 8,3 fallecidos por cada 100.000 personas (12,7 en los hombres y 4,1 en las mujeres).
Estos resultados, no hacen sino reafirmar la necesidad de realizar una mejora urgente de las medidas de prevención del suicidio existentes, de cara a eliminar, de una vez por todas, este problema de salud pública –definido así por la OMS-. En España, concretamente, esta reforma pasa por la futura actualización de la Estrategia de Salud Mental -que, según ha adelantado el Gobierno, se encuentra en proceso de evaluación-, en la cual se llevará a cabo una redefinición de los objetivos y acciones de prevención del suicidio, para poder desarrollar medidas que puedan hacer frente de forma eficaz a este grave problema.
Fuente: INE / INFOCOP
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