Las identidades o expresiones de género no normativas no son trastornos de la salud, por lo que no pueden suprimirse, negarse, discriminar a partir de ellas, ni pretender un cambio o modificación. Así lo establece la guía Nada que curar, publicada por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito junto a otras asociaciones interesadas, que se establece como la guía de referencia para los profesionales de la salud mental que pretenden trabajar con las personas LGTBI+ desde el respeto a sus derechos fundamentales y en contra del uso de las terapias de conversión sexual, unas terapias que no cuentan con fundamentación científica y que pueden ser potencialmente daniñas y de las que hemos hablado ampliamente en Infocop (ver aquí). La guía, dirigida a profesionales de la salud mental, pero también a otros profesionales sanitarios y sociales que trabajan con colectivos LGBTI+, proporciona una explicación y encuadre de la diversidad sexual, así como describe las técnicas que cuentan con evidencia científica para afirmar a los jóvenes LGTBI, bajo un modelo enmarcado en la defensa de los derechos humanos. | ||||
El documento, que se trata de un recurso esencial para la sensibilización y capacitación de los profesionales interesados, se divide en varios capítulos que tratan sobre:
En la guía se ofrecen recomendaciones y orientaciones para motivar la aceptación de los padres y madres en el apoyo a la orientación sexual de sus hijos, de forma que se presenta un programa de intervención diseñado para eliminar cualquier tipo de conducta discriminatoria y estigmatizante hacia los jóvenes LGBTI+, asegurando su bienestar psicológico. Asimismo, la guía proporciona acceso a recursos adicionales para los profesionales de la salud mental y otra información complementaria. Se puede descargar la guía en el siguiente enlace: fuente: infocop |