lunes, 19 de julio de 2021

Directrices de la OMS sobre actividad física y hábitos sedentarios



La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha publicado las Directrices de sobre actividad física y hábitos sedentarios. En la guía se ofrecen recomendaciones para la realización de actividad física y para evitar las conductas sedentarias tras la revisión de la literatura científica existente y más actual.

Tal y como advierte la OMS, la inactividad física es un factor de riesgo de mortalidad, mientras que la actividad física realizada de manera regular constituye un factor de protección frente al desarrollo de enfermedades no transmisibles, como las enfermedades cardiovasculares, la diabetes, el cáncer de mama y el cáncer de colon. Asimismo, se ha comprobado que la realización de actividad física previene el desarrollo de otros problemas de salud mental y retrasa la aparición de la demencia, contribuyendo notablemente al bienestar general de la persona.

En la medida en que la actividad física se puede realizar en una variedad de intensidades e incorporar como rutina en diferentes espacios y contextos, la guía de la OMS pretende ofrecer orientaciones basadas en la evidencia para que los profesionales de la salud puedan desarrollar programas de prevención y de promoción de la salud que incorporen la realización de actividad física adaptada a todas las personas, independientemente de su edad o de su estado de salud. De esta manera, en el texto se ofrecen recomendaciones para diferentes grupos: niños y jóvenes entre 5 y 17 años, adultos entre 18 y 64 años, mayores de 65 años, mujeres embarazadas y en periodo de posparto, adultos con enfermedades crónicas y niños y adultos con discapacidad.

El objetivo general de estas recomendaciones es proporcionar información precisa sobre la cantidad de actividad física (frecuencia, intensidad y duración) que puede realizar cada grupo y que supone un beneficio para su salud. En este sentido, el grupo de expertos encargados de elaboración de la guía realizaron una revisión de los estudios que han encontrado efectos positivos de distintos tipos de ejercicios (aeróbicos, fortalecimiento muscular, de equilibrio, ejercicio para evitar las caídas para los adultos mayores, etc.). Se trata, además, de la primera vez que se ofrecen recomendaciones basadas en la evidencia sobre la relación entre la conducta sedentaria y los riesgos para la salud.

Se puede acceder al documento en el siguiente enlace:

Guideline on physical activity and sedentray behaviour

FUENTE: INFOCOP