Somos conscientes de la especial vulnerabilidad a los efectos de la transfobia social que experimentan las personas trans más jóvenes; pero también de que la mejor herramienta para luchar contra ella es la formación y la educación. Una lucha contra la transfobia que tiene que darse desde los espacios de educación académica, pero también desde los de educación no formal. Este es el mensaje que pretende difundir la nueva guía elaborada por la Federación Estatal LGTB (FELGTB). La guía, editada por el Ministerio de Derechos sociales, lleva por título Guía para el acompañamiento de personas trans jóvenes en los espacios de educación no formal, y tiene como finalidad ofrecer pautas y recomendaciones para los educadores y responsables de este tipo de contextos para que puedan generar espacios seguros (transinclusivos) para las personas trans y detectar posibles jóvenes en riesgo de discriminación transfóbica.
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Tal y como se señala en la publicación, el 51,9% de las personas trans se han sentido discriminadas por su identidad de género en los espacios de educación no formal, lo que evidencia que se debe trabajar activamente para la protección de estos menores. En la guía se aborda la importancia de la creación de espacios de educación no formal transinclusivos, los aspectos fundamentales a tener en cuenta, los posibles obstáculos y barreras y la detección de jóvenes en riesgo y pautas de abordaje, así como el establecimiento de dinámicas de apoyo al alumnado trans, tales como conocimiento del nombre y género que quiere usar en ese contexto, pactos sobre el uso del lenguaje, detección de situaciones de trato inadecuado en el alumnado y otras dinámicas. La guía puede descargarse en la Web de FELGTB y en el siguiente enlace: Guía para el acompañamiento de personas trans jóvenes en los espacios de educación no formal |
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