Prevención de los trastornos alimentarios. Entrevista a Greta Noordembos

El incremento que han experimentado los trastornos de alimentación en las últimas décadas ha sembrado la voz de alarma sobre un problema que los expertos coinciden en calificar de epidemia.

Unido a esto, su aparición a edades cada vez más tempranas obliga al desarrollo de programas de prevención que ayuden a frenar el aumento de la prevalencia de estos trastornos entre la población de riesgo.

En los últimos años hemos asistido a un creciente interés en la prevención primaria de los trastornos de alimentación, que se ha centrado fundamentalmente en el trabajo con escolares, en la formación del profesorado y en el trabajo con padres. En este sentido se ha apostado por estrategias de prevención que tienen como objetivo favorecer el desarrollo de habilidades (autoestima positiva, asertividad, habilidades comunicativas, seguridad en la propia imagen corporal, etc.) y recursos en los niños y jóvenes, para enfrentar muchas de las situaciones de la vida cotidiana. Este tipo de actuaciones sitúan a los centros escolares como escenarios privilegiados, y a los padres y profesores como importantes agentes de prevención.

Consciente de la importancia de la prevención en este tipo de trastornos, Infocop online ha querido entrevistar para sus lectores a Greta Noordebos, por su larga trayectoria en la investigación sobre factores de riesgo y de prevención de los trastornos de alimentación. En este sentido, ha desarrollado un programa completo de prevención orientado a la escuela, que se fundamenta en los resultados de los estudios más relevantes. Noordenbos, que ha colaborado con el conocido Walter Vandereycken en diferentes trabajos, ha publicado numerosos artículos y libros, muchos de los cuales pueden encontrarse en castellano.

ENTREVISTA

Los trastornos de alimentación (anorexia, bulimia, obesidad…) son problemas complejos en los que están implicados factores individuales, sociales, familiares y culturales. Por este motivo, la prevención debería orientarse a todos estos niveles. ¿Qué tipo de estrategias de prevención se deberían tomar en cada uno de ellos?

Efectivamente, para realizar prevención primaria es necesario llevar a cabo diversas estrategias que impliquen diferentes niveles de actuación. La prevención debería incluir los siguientes aspectos:

1. La educación preventiva en los propios centros educativos. 
2. La información sobre prevención de los trastornos alimentarios orientada a profesores y directores de los propios centros.
3. La información sobre prevención de estos trastornos orientada a los médicos de los centros educativos y a los médicos de atención primaria. 
4. El generar boletines informativos sobre la prevención dirigidos a los padres.

En relación a la educación preventiva, el programa más novedoso que se está llevando a cabo en los Países Bajos, y que es representativo de lo que un programa o una estrategia debe considerar, se centra en 5 objetivos fundamentales:

1. La educación sobre los medios de comunicación. A través de clases sobre los medios de comunicación, los estudiantes aprenden a interpretar y entender de forma crítica los mensajes que ofrecen estos medios: la construcción de los ideales de belleza, las estrategias de manipulación de imágenes mediante el uso del photo shop, la selección de mujeres extremadamente delgadas y jóvenes para las campañas publicitarias, etc. 
2. La mejora de la autoestima. Se debe desarrollar la autoestima de una forma activa, proponiendo tareas para la mejora de la propia autoestima y la de los amigos de los niños y adolescentes. 
3. La mejora de la imagen corporal. Debe conseguirse de manera activa, utilizando tareas para la mejora de la imagen de uno mismo y la de los amigos. 
4. La mejora de las emociones a través de la reducción de la ansiedad y el estrés negativo. Un objetivo fundamental para la prevención de los trastornos alimentarios es aprender a manejar y afrontar las emociones y el estrés que son negativos. 
5. La ingesta de alimentos sanos y actividades deportivas. Algunas preguntas importantes son: ¿Qué es la ingesta de alimentos sanos? ¿Cómo puedes alcanzar y mantener un peso sano? ¿Por qué es más eficaz un estilo de vida que conlleve la ingesta de alimentos sanos y la realización de actividades deportivas que un estilo orientado al adelgazamiento?

¿Cuáles son los colectivos, desde su punto de vista, más relevantes como agentes de prevención? ¿Cuáles serían las actuaciones de estos colectivos?

Nuestra experiencia en los Países Bajos nos muestra que lo más interesante es contar con agentes de prevención específicos. En los Países Bajos, tenemos especialistas y asesores en prevención en la mayor parte de los Centros de Salud Mental General. Éstos se organizan en Plataformas de Prevención de Trastornos Alimentarios, en las que también participan investigadores especializados en la prevención. Los miembros de estas Plataformas se reúnen cuatro veces al año y discuten la nueva información, así como estrategias y resultados relativos a los trastornos alimentarios. Los especialistas y asesores en prevención de los Centros de Salud Mental General contactan posteriormente con los centros de educación primaria y secundaria de sus distritos, y se encargan de trasladar la información y de informar, así mismo, a los médicos de los centros educativos y de atención primaria sobre los medios existentes en la detección de los trastornos alimentarios en un estadio temprano.

En las últimas décadas ha aumentado el interés por desarrollar programas escolares para prevenir los trastornos de alimentación. ¿Nos podría concretar las características principales que deberían reunir estos programas, sus componentes fundamentales, y las técnicas que incluyen? Desde su experiencia ¿cuál es el grado de eficacia de estos programas?

Tal y como se apunta en la primera pregunta, los objetivos principales incluirían:

• Desarrollar una actitud crítica frente a la información ofrecida en los medios de comunicación (educación sobre los medios). 
• Mejorar la autoestima. 
• Mejorar la imagen corporal. 
• Mejorar el manejo de emociones y la reducción del estrés. 
• Promover hábitos alimenticios saludables y la actividad física.

Las estrategias principales deben incluir la participación activa a través de la asignación de tareas para realizar en casa y en la escuela, discusiones de grupo, role playing, etc.

Así mismo, cuando sea posible, se debe implicar a los padres en la prevención a través de la lectura de boletines informativos y de la realización de tareas conjuntas con los propios estudiantes.

Para llevar a cabo estos programas de prevención en las escuelas, la propia dirección debe de estar también comprometida y los profesores que imparten las charlas sobre prevención deben de estar bien entrenados. Además, es fundamental que los médicos de los centros educativos conozcan los factores de riesgo de los trastornos alimentarios, así como las señales tempranas que indican la posible existencia de un trastorno. Es imprescindible, así mismo, que conozcan qué debe de hacerse cuando un estudiante puntúa alto en factores de riesgo: deben saber cómo contactar a estos estudiantes y hacer la derivación a un tratamiento especializado cuando sea necesario.

Los trastornos de la alimentación han dejado de ser una enfermedad exclusiva de mujeres para pasar a afectar también a los varones, aunque la tasa de prevalencia es muy superior en la población femenina. A la hora de la prevención, ¿se deberían contemplar actuaciones diferentes en función del género?

Sí. En primer lugar, todos los agentes que intervienen en la prevención, esto es, los profesores, los médicos de los centros educativos, los de atención primaria, y también los propios padres y estudiantes deben saber que los niños y hombres pueden, de manera general, desarrollar trastornos de la alimentación. Pero también deben saber, más específicamente, que el ideal corporal de niños y hombres es diferente y que desarrollan con mayor frecuencia las variantes masculinas de los trastornos alimentarios. Éstas son, insatisfacción corporal por no tener musculatura suficiente y un trastorno dismórfico corporal–Dismorfofobia- (ver el libro de Pope y colaboradores: El Complejo de Adonis).

Desde su punto de vista, ¿cuál es el papel de la Psicología tanto en la prevención como en el tratamiento de los trastornos de alimentación?

La investigación está muy relacionada con los factores de riesgo psicológicos, tales como una baja autoestima, una imagen corporal negativa, o la alta sensibilidad de los niños y niñas en la pubertad a los mensajes de los medios de comunicación. La Psicología debe desarrollar estrategias de prevención orientadas al cambio de actitudes sobre la imagen corporal, la autoestima negativa, comportamientos orientados al adelgazamiento, miedo a engordar y emociones y estrés negativos. Debe generar programas para el desarrollo de una identidad positiva y de una autoestima y actitud hacia el cuerpo positivas. El papel de la Psicología en la prevención de los trastornos alimentarios, es, bajo mi punto de vista, fundamental.

¿Cuáles son los retos futuros de la Psicología en el ámbito de la prevención de los trastornos de la conducta alimentaria?

Conocer no sólo cómo los diferentes factores de riesgo conducen a un trastorno alimentario, sino también cuál es el proceso de desarrollo de esos trastornos y cuáles son las mejores estrategias de intervención en este proceso.

Iría más allá, y diría que es importante que la Psicología se centre en el desarrollo de estilos de vida saludables y de una identidad positiva en la gente joven; en cómo pueden los jóvenes (chicos y chicas de diferentes orígenes socioeconómicos y étnicos) desarrollar un estilo de vida saludable y una identidad positiva, especialmente aquéllos cuyos ambientes sociales no ofrecen suficientes oportunidades (por pobreza, problemas familiares, ingesta de alimentos no sanos y falta de modelos para aprender estrategias que permitan el manejo de emociones y estrés negativos). Éste es un enorme reto para el futuro.

Ya para finalizar, ¿le gustaría añadir alguna otra cuestión?

La evaluación de la estrategia de prevención que se ha puesto en marcha en los Países Bajos, descrita en la primera pregunta, ha obtenido unos resultados muy positivos y exitosos. Una pregunta que se abre, ahora que hemos abordado estos aspectos, es cómo podemos llegar a los padres de una forma positiva y eficaz. Estaría encantada de recibir cualquier tipo de sugerencia o propuesta a este respecto (Noordenbos@FSW.Leidenuniv.nl).

FUENTE: INFOCOP